21 Marzo 2024 | En: Historias desde el territorio
Nuestra estudiante de Ciencias Ambientales llegó a pensar que no iba a lograr su título como profesional. El tiempo no alcanzaba, el desafío de estudiar era enorme para esta joven madre de familia. Hasta que conoció la IU Digital de Antioquia.
A Manuela Rodríguez le gusta el verde fresco y brillante que envuelve a Marinilla porque ella se inspira del aire, la vegetación exuberante y la armonía de la naturaleza. La protección del medio ambiente es una pasión para Manuela, solo superada por el amor a sus dos hijas, Isabella de 17 y Valeria de 16 años.
También disfruta tener sus proyectos en orden. Siempre quiso estudiar una carrera que tuviera que ver con el medio ambiente, empezó con la tecnología ambiental, pero el nacimiento de sus hijas la obligó a poner los planes en pausa. “Yo fui mamá muy joven y eso alteró el orden de las cosas, sin embargo, el objetivo siempre fue el mismo: ser profesional, tener un título, dar ejemplo a mis niñas”.
El ejemplo se muestra con el “corre corre” de todos los días, el cumplimiento de las responsabilidades laborales, las tareas de la casa, estar atenta a sus hijas. Y pese a que no le faltaban deberes, un día se matriculó en la Universidad de Antioquia para finalizar la profesionalización, con un título de ingeniería ambiental. “Empecé con toda la energía y la felicidad, por fin, estaba en camino de cumplir mi sueño, sin embargo el tiempo me demostró que no iba a ser tan fácil”.
La angustia de no tener más horas al día para cumplir con todo, los desplazamientos a la sede presencial, la alta demanda académica y la inflexibilidad de los horarios de clase, fueron frustrando el sueño de Manuela, que sintió que iba de última en la maratón que corría todos los días. Además, se afectaba la calidad de vida de ella y de sus hijas. Solo pudo hacer dos semestres en la UdeA.
Pero como dicen los abuelos, “al que le van a dar le guardan”. Manuela encontró un día la posibilidad de profesionalizarse con la IU Digital de Antioquia y hoy su historia es muy distinta.
“Un día me enteré de que existía la IU Digital de Antioquia y que ofrecía el programa de Ciencias Ambientales. Empecé a preguntar más detalles sobre el programa, supe que la universidad era pública, que tenía buenos costos de matrícula, que me funcionaban los horarios con el trabajo, que me podía conectar desde donde estuviera, todo era posible para mi situación. Luego apliqué a una beca con la Fundación Gilberto Echeverry, estoy becada y estoy a pocos meses de graduarme, porque me homologaron varias materias”.
Hoy todo se parece a lo que soñó hace años. “Vivo con mis dos hijas, ellas ya se cuidan solitas y están muy concentradas en su estudio, son niñas juiciosas. La mayor ya terminó el bachillerato y Valeria termina este año. Las tres vamos a ser profesionales y yo no pido más a la vida”.
